Navidad entre amigos

Este año decidimos hacer algo diferente para navidad ya que estamos tan lejos de nuestra familia. Algunos de nuestros amigos, que también viven lejos de sus familias, decidimos pasar las fiestas juntos. La familia Soares, nuestros amigos de Brasil, y la familia Fernandez de México nos unimos para hacer la fiesta. También invitamos a los misioneros de la rama para que se unieran a la diversión.

El plan era sencillo: todos traeríamos un plato principal, un acompañamiento, un postre y una bebida. Las fiestas no son fiestas si no hay más comida que comensales. Nosotros nos decidimos en hacer un pavo, arroz con elotitos, y de postre un pie de queso. El único problema fue que Debora seguía con nauseas, así que me tocaría a mí hacer la comida. El pie de queso fue fácil, lo ordené en The Cheesecake Factory, listo.

Me preocupaba muchísimo el pavo, no sabía que iba a hacer. Debora me tranquilizo cuando me envió la receta que siempre hemos usado, una receta que nos dio Jessica (mi hermana). Normalmente con el pavo, Debora lo descongela, lo limpia y luego prepara la mescla para sobar. Yo luego sobo el pavo, y juntos lo metemos en la bolsa especial. Debora entonces lo hornea y yo lo parto. Este año, yo tendría que hacer todas las partes!

Al final, puedo decir que no es difícil hacer un pavo, la receta de la mescla era fácil y la sobada no me costó. El pavo era pequeño (10 lbs), asi que era fácil manipularlo y ponerlo en la bolsa. Le puse el caldo y lo deje cocinar por aprox. 2 horas y listo. No lo podía creer, yo cociné el pavo. Debora me tuvo paciencia con todas las preguntas tontas que le hacía. “Y que hago con el pescuezo?” “Cómo se enciende el picador?”

Como siempre Debora salió al rescate con el arroz, en parte porque se sentía mejor, pero en parte porque quería hacer una nueva receta para el arroz con elotitos. Estoy tan contento que ella los hizo, porque le quedaron deliciosos, la crema la hizo muy parecida a los elotitos cremosos de Thanksgiving.

A las 7 empezaron a llegar todos los invitados con toda la comida. La familia Soares trajo una mayonesa brasileña, parecida a la ensalada rusa de Guate pero manzana y huevo. También trajeron unos panitos de papa y mantequilla con miel y de postre un pie de limón.

Los Fernandez, que también vino la mamá de Cris, Aracely, trajeron Bacalao a la Vizcaina, bolillos mexicanos y una pierna de cerdo deliciosa. Yo tenía ratos de no comer Bacalao y este estaba delicioso, en especial con los bolillos calientitos.

Después de comer y comer pasamos a los juegos. Primero jugamos elefante blanco, la regla era que un regalo solo se lo podían robar 3 veces. De los regalos más codiciados fue unos juegos de madera y unas trufas de chocolate. Los misioneros también participaron y fue un mate de risa. Uno de los regalos era popó de perro falso, nunca me hubiera imaginado que a la que más le gustó ese regalo fue a Nicole.

Es alegre pasar tiempo con los misioneros, en especial durante eventos familiares y poder conocerlos más. Los misioneros de la rama son Elder Paxman, Elder Ryan, Elder Wright y Elder Porter. Todos nos hicieron reír y pudimos ver lo jovencitos que son. A veces nos olvidamos que no tienen más de 20 años, pero tienen un espíritu muy especial. Después del elefante blanco jugamos un que se llama Headbandz, nunca lo habíamos jugado pero estuvo buenísimo.

A medida que fue entrando la noche, los misioneros regresaron a su casa. Llamamos a los abuelitos por facetime y les deseamos una feliz navidad. Los niños se portaron muy bien, pusimos la tele en el cuarto de Niki y pusimos a Curious George en Netflix; podían escoger ir a ver tele al cuarto o jugar en el cuarto de juguetes. Son bastantes niños, de los Fernandez esta Iker(5), Zury (2) y Nicolás; luego Ben(2) de los Soares y Nicole. Todos estuvieron jugando y viendo tele, corrieron y saltaron; fueron pocos los conflictos.

Al final de la noche, con el estómago lleno y el corazón alegre recibimos la navidad entre amigos.