Semana de enfermos

Lunes 19 de agosto, 2019 – Columbus, Indiana

Definitivamente tuvimos en la casa una semana complicada, pero logramos terminar contentos, unidos, y sanos. Los enfermos fuimos Debs, Luna y yo. Yo fui el primer herido. El lunes llevé a Pao a seminario y fui a correr cerca de la capilla. Antes de empezar, me tropecé en un hoyo en la calle, caí en mi costado y me golpeé la costilla. Pasé toda la semana con dolor que mejor fui al doctor el viernes en la mañana. Por suerte no pasó a más, no tenía una quebradura solo un golpe fuerte.

El martes fue la operación de Debs para remover el cálculo renal. Pensamos, realmente solo yo pensé, que la recuperación sería más rápida. Pedí permiso en el trabajo para acompañar a Debs y dejamos a los dos más pequeños con una hermana de la iglesia. La operación duró una hora y regresamos a la casa después de almuerzo. La recuperación fue difícil y tomé el resto de la semana a cuenta de vacaciones para estar con Debs y los chiquitos.

Luna fue la tercera. El miércoles se empezó a sentir mal. No estaba comiendo bien, lloraba bastante y no lograba dormir mucho. Pensamos que tenía gripe, pero no lográbamos que tomara la medicina. El domingo descubrimos que le habían salido los dos dientes de abajo. Le duró el malestar sólo un par de días, pero con todo lo que estaba pasando en casa se sintió una eternidad.

El resto de los niños están bien. Pao terminó su primera semana de seminario. Niki me ayudó mucho haciendo sus quehaceres. Andrew empezó la escuelita. El sábado que ya nos sentimos mejor fuimos a dar una vuelta por la casa. Me llevé a los niños a un barranco atrás de la casa, fue toda una aventura para ellos.

Estoy muy contento de que logramos superar esta semana; al final todos estamos sanos y contentos.